Todos hemos escuchado hablar mucho de la
fábula de la gallina de los huevos de oro, poco, quizá, del maravilloso
ganso de plumas blancas, que ponía huevos de oro; y seguramente, que no le es
desconocido el relato del odre de los
vientos, en el paso de Ulises por la isla de Eolia. Partiendo de esa inconclusa hipótesis
correlacional, quiero provocar una nueva reflexión, esta vez acerca del valor
de Fecode, sus sindicatos filiales, la ADE y la CUT.
FECODE y ADE : Aves de los huevos de
oro.
El
genotipo de estas organizaciones sociales lo componen genes y cromosomas de
maestros y maestras, quienes, en el año 1959, exteriorizan su composición
fenotípica como cuerpos que defienden los derechos de sus asociados. En el año
en que Fecode recibe su registro civil de nacimiento, el ADN de esa promisoria
criatura denominada: Asociación Distrital de Educadores es afectada por un
mutágeno biológico, conocido con el nombre del Sindicato de Institutores de
Bogotá (SIB), fundado en 1962 por un sector de docentes conservadores (Rodríguez, 1987),
defensores de las políticas del gobierno distrital y nacional, organismo que no
solo intentó alterar las secuencias fenotípicas del hospedador sino decrecer la
reserva aurifica de lo que hoy es la gallina de los huevos de oro.
Mutogénesis
como la referida no ha sido la única, aunque si la primera, ni será la última
que atente contra el ADN de las organizaciones sindicales de izquierda. Son
varios los ejemplos, pero tal como acontece en la naturaleza viviente, los
organismos sociales han podido crecer, porque han hecho de sus adversidades
potencialidades y este es el reto que nos corresponde asumir en estos momentos
de crisis, para impedir que algunos labriegos y
mercaderes degüellen a la gallinas y el ganso de los huevos de oro.
Fecode
y los sindicatos filiales son una herencia política, cultural y social que nos
han otorgado los valientes creadores; y, como toda herencia que se valore, no
se debe malbaratar; al contrario, nos corresponde cuidar y mejorar porque, como
se ha dicho, es elevado el costo que el magisterio ha pagado en: dolor,
sufrimiento, hambre, persecución, vilipendio, represión y muerte. Esa mina de
oro que atesoran y auscultan las organizaciones gremiales del magisterio, no se
puede someter al extractivismo minero, tal como lo viene haciendo la locomotora
minera. Ese tesoro hay que protegerlo como la ostra cuida la perla porque,
literalmente, Fecode y los sindicatos que la conforman, son ostras constituidas
con el nácar de la lucha incansable y ejemplar. Son aves perseguidas por el
valor de sus huevos a las que los cazadores del capitalismo salvaje las tienen en
vía de extinción. En esta historia de cacería neoliberal, los leones y las
leonas del magisterio no podemos glorificar al cazador, porque tenemos nuestros
propios historiadores, probablemente falta conocer más la historia y a los
legendarios leones darla a conocer, para vigorizar las aves.
Paralelismo sindical, clientelismo,
oportunismo, politiquería e infantilismo de izquierda
En la travesía de Ulises, de Troya a Itaca, los viajeros
exploraron dos curiosas situaciones: la de los lotófagos y la ayuda de Eolo. En
el primer caso, los hospitalarios habitantes embriagaron a los exploradores,
con los frutos de loto, tanto que dejaron
de pensar en su misión, en el regreso a la patria y en el olvido de su país,
poniendo a Odiseo en apuros. En el segundo, el dios de los vientos le ofreció
ayuda al esposo de Penélope, sobresaliendo el hecho de guardar, en un odre de
piel de toro, los vientos desfavorables, aliviando así el desplazamiento. No
obstante, remeros y expedicionarios, en alta mar, creyendo que el odre era un
regalo de oro y plata, que Eole le había cedido a Odiseo, lo abrieron,
desatándose una violenta tormenta que dificultó el avance hacia la isla.
“La historia de los vencidos” muestra que el paralelismo
sindical, el clientelismo, el oportunismo, la politiquería, el infantilismo de izquierda y el desconocimiento
de la historia, en las organizaciones gremiales, son los vientos desfavorables
que se guardan en la inconsciencia de algunos directivos sindicales. “La
historia de Bronce” los adula como admirables líderes. El paralelismo sindical,
el clientelismo, el oportunismo, la politiquería y otros vicios de la
dirigencia sindical son los vientos que han puesto a tambalear la barca que, en
el caso que nos ocupa, se lanzó a las aguas del convulsionado océano a finales
de 1950. Paralelistas sindicales, clientelistas, oportunistas de derecha y de
izquierda, politiqueros y desconocedores, en la praxis, de la historia de
nuestro fenotipo, son lotófagos que quieren pescar en el mar revuelto por
tormentas como las negociaciones, desconociendo que hay mucho mar por recorrer,
olvidando que el magisterio no se puede embriagar y quedar ahí en la costa de
Eolia, relegando la misión para la cual fue creada Fecode y la ADE.
No hay duda, eso si, que algunos remeros, a quienes los
viajeros les hemos otorgado el poder para bogar la barca, se han equivocado, no
han sido coherentes, poniendo en riego el viaje y nos hemos equivocado, algunos
viajeros, al seguirles confiriendo el poder de estar al timón, a sabiendas de
los errores se siguen cometiendo y conscientes de que hay mejores tripulantes. Al
estilo de las Enseñanzas de don Juan,
hemos caído en la “yerba del diablo”, porque no la hemos sabido usar. La “yerba
del diablo” tiene cuatro cabezas: la raíz, la mas importante, por la que se
conquista el arbusto; el tallo y las hojas es otra cabeza, con ella se curan
enfermedades; las flores, que vuelven locos a los hombres, es la tercera
cabeza; la semilla es la cabeza más poderosa, es la “cabeza sobria”, la única
capaz de fortificar el corazón y estimular el conocimiento en el hombre.
Cojamos entonces la yerba por la raíz y usemos las semillas,
no requerimos tocar el tronco ni las flores porque no estamos enfermos ni
queremos enloquecernos. Paralelistas sindicales, clientelistas, oportunistas de
derecha y de izquierda, politiqueros y desconocedores, en la praxis, de la
historia de nuestro fenotipo, parece que están embriagados con loto y con el
elixir de la “yerba del diablo”. A ellos hay que ayudarlos, impidiéndoles el
consumo de esas dosis impedidas por la ética de las organizaciones, porque eso
“malogra a los hombres…los hace dominantes, caprichosos y débiles en medio del
gran poder” (Castaneda, 1969, 76)
Las fabulas también nos enseñan que la avaricia y la
ambición llevaron al labriego y al mercader a cometer el irreparable error de
matar a la gallina de los huevos de oro y al maravilloso
ganso de plumas blancas. Convocar a la desafiliación de los sindicatos
y de la federación es declararse poseído por la tercera cabeza de la “yerba del
diablo”, es afilar el cuchillo, en la piedra de la clase burguesa, para
degollar la gallina y el ganso proletarios, por los mismos proletarios, como si
nosotros no supiésemos que ese es un juego perverso en el cual no vamos a caer,
porque a pesar de las turbulencias del viaje y del mareo que nos cause la incorrecta
navegación de algún tripulante, actuamos bajo la egida de la cuarta cabeza, la
cabeza que fortifica, la sobria, la que no intoxica.
Fecode, ADE, CUT y los sindicatos filiales no pueden seguir
dejando que la “yerba del diablo” se consuma con la regulación del
neoliberalismo. Le corresponde, reconocer que hay nuevas semillas, que hay una
generación de relevo, no inferior al 40% de maestras y maestros, ansiosos de
poder. En ese reconocimiento, los directivos sindicales, que deben
transformarse en dirigentes, acudiendo a un concepto gransciano, no pueden
auspiciar con su actitud incorrecta, algunas veces, con la indiferencia, en
otras con la ignorancia en determinaos momentos, que la gallina y el ganso sean
degollados, porque “bien o que mal”, como se expresa en el argot popular, “nos
hemos suplido”, por mas de medio siglo, de sus huevos y si cuidamos esos bípedos
con plumas, sin atropellar su proceso, tendremos huevos de oro para largo rato,
pensando en que los quilates le den mas brillo, propendiendo porque suban el
peso, que no se rompan ni se agüeren, sino
que ensanchen la producción.
Fecode, ADE, CUT y los sindicatos filiales – parafraseando a
Gibran: Ustedes son los arcos de los cuales sus maestros, como flechas vivas,
somos enviados. El
arquero ve el blanco en el paso del finito, y quien los dobla a ustedes, con su
fuerza, para que sus flechas vayan raudas y lejos. Que su torsión, en la mano
del arquero, haga horma políticamente, porque así como el arquero ama la flecha
que vuela, así también ama el arco que se tensa. Somos arco y flecha. Ejemplos como la creación de las
cooperativas del magisterio, en las que la ADE, por citar el caso más cercano,
fue fundadora de la Cooperativa de
Ahorro y Crédito del Magisterio de Bogotá Distrito Especial Ltda- CODEMA, al lado un reducido número de educadores. Cincuenta años después, la
semblanza del fenotipo, la satisfacción es muy positiva.
En el decenio del 90, Bogotá asistió al ingreso de una generación
de maestros de relevo, muy entusiastas, combativos, estudiosos, constantes,
beligerantes y decididos. Lograron arrancarle al gobierno distrital, al lado de
“la gallina de los huevos de oro”, el nombramiento en propiedad, sin examen de
ingreso. Varios de esos líderes hoy integran la junta directiva del sindicato y
de la Federación. Fueron muy incisivos en la lucha: realizaron tomas de
entidades públicas, emisoras, calles; trabajaron, hombro a hombro con las
comunidades educativas y con los maestros del único estatuto existente; se
asesoraron jurídicamente y estudiaron, con ahínco, la historia del movimiento
sindical y de las organizaciones populares.
Consumado el reciente acuerdo Fecode- MEN, afloran una serie
de manifestaciones de inconformismo por los resultados del paro, tanto que a
los directivos de los sindicatos y de Fecode se les endilga la
irresponsabilidad de haber levantado un movimiento en “el momento menos oportuno”.
En ese ir y venir de acusaciones, dirigentes de los otrora “maestros
provisionales” fueron vetados “por las masas”, en algunas asambleas por
“traición al movimiento”. De este accionar, sobresalen dos aspectos a
interrogar: ¿Qué pasó en la metamorfosis de la base magisterial a la directiva de
ADE y de Fecode, de unos dirigentes en antaño combativos y revolucionarios?
Las nuevas fuerzas que están intentando constituir el paralelismo sindical y la
“recuperación” de la ADE y de Fecode, para “el magisterio” ¿Qué comportamiento
político y ético van a asumir con las bases, para que la historia no se repita? Es evidente también que los maestros noveles vienen avanzando en el escalamiento de docentes de aula, a directivos del sindicato, pese a las adversidades administrativas. Hoy, en el caso de Bogtoá, hay un ejemplo, pero dentro de dos lustros serán mayoría.
Finalizo diciendo, que para la mayoría de los maestros de
Colombia es claro, que la generación de relevo del magisterio es la que está
llamada a ponerse al frente de la corbeta. En esa racionalidad, carece se
sensatez herir a la gallina y al ganso de “los huevos de oro”, porque con las
aves muertas la muchedumbre no camina ni enseña a caminar. Hemos caminado y
hemos enseñado a caminar, tal como las comunidades lo han reconocido a lo largo
de la existencia. El deber ético y político es cuidar esa herencia y
acrecentarla, es no quitarle el agua al pez. Odiseo, en el desembarque en la isla de Eolo, al ver el
comportamiento de sus acompañantes: ebrios con los lotófagos, no los abandonó,
los llevó al banco de los remeros, ni
su obstinada negativa ni sus lágrimas de rey se lo impidieron.
Fecode, sus sindicatos filiales y los asociados debemos aprender de Ulises, máxime si hay un nutrido grupo de docentes ansiosos de obtener pronto el poder. A ellos hay que atenderlos e invitarlos a que conquisten la planta por la raíz, sin darle golpes con la pala, a que no se dejen hechizar con el tallo, con las hojas y con las flores de la “yerba del diablo”, acompañarlos a que piensen y obren con la cabeza más poderosa: la cabeza de las semillas, la “cabeza sobria”, la única capaz de fortificar el corazón y el intelecto. Estanislao Zuleta (1997) solía decir, que no hay que confundir las causas de las cosas con las condiciones que las hacen posibles.
El magisterio colombiano está en mora de aprender del Buen Vivir/Vivir Bien (2009) como el otro mundo posible. La manera como los zapatistas resisten, cambian el mundo, construyen cosas nuevas, como han asumido el uso de tierra recuperada de los terratenientes, las formas de distribución del poder y la modalidad de enseñanza: sin aulas, sin currículo, aprender haciendo, conviviendo, compartiendo espacios y tiempos de la vida cotidiana, desde la cocina hasta la milpa, la lectura de textos y las asambleas.
Las enseñanzas, de los vecinos de don Juan nos dan pautas para que el movimiento sindical y social avance en líneas más creativas, autónomas y autóctonas: descolonizando el pensamiento crítico y emancipando las prácticas. Unos y otros debemos superar esa concepción de que “el colonizado es un perseguido que sueña permanentemente con transformarse en perseguidor”, así como lo escribió Fanon (Ziebechi, 2015, 289). Se pueden contar, en los dedos de muchas las manos y de muchos píes, la cantidad de dirigentes sindicales cooptados por la hegemonía. De directivos sindical se llega a las jefaturas, incluso hasta el ministerio y desde allí se hace lo que el colonizador exige. Oprimidos que pasan a ser opresores, colonizados que se vuelven colonizadores. ¿Por qué? ¿Para qué? ¿Hasta cuándo? “La única manera de no repetir la historia es mantenerla viva” insistía Eduardo Galeano.
Algunas referencias
ACOSTA, Alberto et al (2009) El Buen vivir. Una vía para el desarrollo. Quito, Abya yala
CASTANEDA, Carlos (1969) Las enseñanzas de don Juan, México FCE
CASTANEDA, Carlos (1969) Las enseñanzas de don Juan, México FCE
RODRÍGUEZ, Dario (1987) La ADE y el bienestar social. Una propuesta desde Trabajo Social. Bogotá D.E, Universidad Nacional de Colombia, departamento de Trabajo Social, tesis de grado.
ZIBECHI, Raúl (2015) Descolonizar el pensamiento crítico y las prácticas emancipatorias. Bogotá DC, ediciones Desde Abajo.
ZIBECHI, Raúl (2015) Descolonizar el pensamiento crítico y las prácticas emancipatorias. Bogotá DC, ediciones Desde Abajo.
ZULETA, Estanislao (1997) Conversaciones con Estanislao Zuleta. Cali, FEZ.
José Israel González B.
Colegio Nuevo Horizonte, Bogotá DC
Bogotá DC, mayo 24 de 2015